Sake Junmai Ginjo elaborado de forma artesanal en el estado de Maine, en Estados Unidos. Tiene notas ahumadas y de madera. Marida muy bien tanto con carnes a la brasa como con la langosta típica de la región.
Elaborado con Yamadanishiki, de aroma fresco y limpio con notas de anis. Con cuerpo y redondo en boca con final fresco y elegante. Es mejor degustarlo frío.
Responde a la sutileza y amplitud de registro que se pide en esta categoría de sake, con pera, espárrago, anís, piel de plátano seco... muy armónico. La entrada se divide en dos sabores: la glicerina y el punto cálido-salino (umami) final. Deja el fino toque de chicle con persistencia más breve de lo esperado. Consumo: 8ºC.
Refrescante y con cierta aguja que nos recuerda que es un sake sin pasteurizar. Notas de arroz y ligeramente ácido. Sin pasteurizar antes de entrar en la cuba de maduración pero pasteurizado antes de embotellar. Acompaña ingredientes frescos o crudos (sashimi, shiromi). Ayuda a limpiar la textura. Servir bien frío.
Aroma muy limpio, de cierta potencia para lo habitual, con melón, plátano seco, piña, flores, todo en armonía y lleno de sutilezas. La amalgama de sabores se expande en el paladar dejando una agradable sensación de frescor. Consumo: 8ºC.
Sake elaborado íntegramente con arroz Miyamanishiki. El arroz para el koji está pulimentado hasta un 40% y el resto de arroz se pule hasta un 50%. Como no podía ser de otra manera, utiliza la levadura Nº 6 descubierta por la bodega Aramasa. Esta levadura confiere al sake aromas sofisticados y un sabor complejo súper interesante.
Normalmente se suele añadir una pequeña parte de alcohol a los sakes Daiginjo al final del proceso para que los sabores y aromas se desarrollen más fácilmente. Pero este no es el caso del sake Ken, elaborado con la mejor selección de arroz y usando técnicas avanzadas para conseguir un sake excelente.